La celulosa y el agua son las materias primas con la se fabrica el papel, con lo que cualquier ahorro que seamos capaces de hacer, va a tener una relación directa con la mejora del medio ambiente ya que estaremos evitando la tala de árboles y el consumo de agua y energía.
Las emisiones derivadas de la distribución del papel no recuperado pueden llegar hasta un 8 por ciento de las emisiones totales de un edificio de oficinas , sumando todas las emisiones directas e indirectas.
Cada tonelada de papel que se recicla evita que se talen 3,14 toneladas de árboles y se consuman algo más de 0,5 toneladas equivalentes de petróleo. Además, teniendo en cuenta el ciclo total de fabricación, la incorporación de fibras recicladas en lugar de la utilización de fibras vírgenes, supone emitir un total de 1,5 toneladas de CO2 equivalente menos por cada tonelada de papel producida.
El papel reciclado es mas barato que el papel normal.
Mediante el uso del papel reciclado:
- Se consumirán árboles
- Se reducirá el consumo de agua y energía. El papel reciclado solo requiere el 10% del agua y el 55% de la energía necesaria para obtener papel a partir de pasta virgen
- Se generará menos de una cuarta parte de la contaminación, incluso teniendo en cuenta las sustancias químicas utilizadas para quitar la tinta del papel.
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